1955, memoria y resistencia

    La Revolución Libertadora generó un fuerte dispositivo de "desperonización" para cumplir sus propósitos. Entre las medidas implementadas, el decreto 4.161 se proponía operar en el espacio de la memoria y se dirigía directamente a su contenido, aunque sin duda estaba previsto que su esfera de aplicación se extendiera más allá. En él encontramos de manera evidente y extrema aquella intención de intervenir sobre la memoria social al establecer  la prohibición de nombrar y de mostrar una identidad que era considerada delito. Este decreto es un emblema de la magnitud de la batalla por la memoria que se desarrolló en la Argentina a partir del 1955. Este libro recupera las voces que entonces se pretendió silenciar. Ellas expresan cómo la acción encaminada a suprimir o transformar los apoyos externos donde la memoria peronista pudiera encarnarse no logró debilitar la fuerza de sus recuerdos. Éstos prosiguieron su trabajo silencioso, replegados en las cocinas, en las fábricas, en los clubes. De este modo, si durante el período 1945-1955 la identidad peronista fue ampliamente moldeada por la prédica del Estado y el liderazgo de Perón y Eva Perón, es posible plantear que a partir del golpe militar de septiembre de 1955, y al menos durante los tiempos iniciales, esa identidad y los contenidos que se le atribuían fueron recreados y reafirmados por los sectores populares que adherían al movimiento con marcada autonomía.

    Escritor
    Colección
    Latitud Sur
    Materia
    Historia
    Idioma
    • Castellano
    EAN
    9789507866067
    ISBN
    978-950-786-606-7
    Edición
    1
    Fecha publicación
    01-08-2007
    Edición en papel
    9.630,00 $